Y de pronto suena esa canción, que no es, ni por asomo la canción más triste que he escuchado, pero por alguna razón, es tan especial, y me recuerda, tantos momentos, tantas ilusiones… Sin previo aviso, mi alma se derrumba sin dejarme apenas mantener la compostura, las lágrimas se precipitan por mis mejillas, y me siento tan triste, tanta nostalgia. Y todo por esa canción!
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