Mientras el agua caliente se precipita rápida hasta la bañera, intento hundirme en ella, profundizarme hasta que la última célula de mi cuerpo esté repleta de ese cálido líquido, quizás eso haga desaparecer toda la confusión que dentro de mí se encuentra en estos momentos. Probemos. Siento calor en cada una de las partes de mi cuerpo, estiro el brazo fuera del agua y hago que el agua salga más caliente, noto como me quema lentamente, pero no consigue expulsar todos los pensamientos que inundan mi mente, noto como me arden los pulmones, me quedo sin oxígeno, intento quedarme pero algo me lo impide, es mi cuerpo, que ha decidido por si solo. Salgo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario